Desde el Centro de Estudios Empresariales de la Cámara de Comercio de Cusco se analiza la dinámica de los precios de los combustibles en la región, contextualizándolos en los ámbitos internacional y nacional.
A nivel global, la OPEP ha anunciado un aumento en la producción de petróleo de 138,000 barriles diarios, lo que ha contribuido a una mayor oferta en el mercado internacional. Además, la cancelación de la licencia de Chevron en Venezuela, que podría reducir el suministro en 200,000 barriles diarios, no ha sido suficiente para contrarrestar la caída en los precios internacionales del crudo. Desde febrero de 2024, los precios del barril Brent (mercado europeo) y West Texas Intermediate (mercado estadounidense) han registrado una tendencia decreciente, lo que ha influido directamente en los costos locales de los combustibles.
En el ámbito nacional, el panorama también favorece una tendencia bajista. PetroTal Corp, el principal productor de crudo en Perú, ha reportado un incremento del 14 % en sus reservas probadas, alcanzando los 67.1 millones de barriles. Además, el campo Bretaña, uno de sus activos más importantes, ha cuadruplicado su tamaño desde 2018, lo que refuerza la capacidad de producción nacional y contribuye a una mayor estabilidad en el suministro de combustibles.
En Cusco, los precios del gasohol y el diésel han mostrado una caída sostenida desde julio de 2024, con una reducción significativa entre septiembre y octubre de ese año (-3.72 % en gasohol y -3.81 % en diésel). A febrero de 2025, Cusco se ubica entre las regiones con los precios más altos del diésel en la Macrosur, pero ocupa una posición intermedia en gasohol regular y premium, lo que refleja una tendencia general a la baja en comparación con otras regiones.