La Enfermedad Diarreica Aguda (EDA) sigue siendo una causa significativa de mortalidad infantil. En 2023, el 12,8% de los niños menores de cinco años presentaron diarrea en las dos semanas anteriores a la encuesta, mostrando una tendencia al aumento en los últimos cinco años. No se observaron diferencias significativas según el sexo, pero la prevalencia fue mayor en los niños de 6 a 23 meses, disminuyendo en los menores de 24 meses.
En cuanto a la administración de líquidos y alimentos sólidos durante la diarrea, más de la mitad de los niños afectados recibieron líquidos en mayor cantidad (53,8%), mientras que solo el 3,9% recibió más alimentos sólidos. Es crucial proporcionar tanto líquidos como alimentos sólidos para contrarrestar la pérdida de peso y acelerar la recuperación postdiarreica.
