Desde el Centro de Estudios Empresariales de la Cámara de Comercio del Cusco presentamos el reporte “El café cusqueño: oportunidades y retos”, en el que se muestra la evolución reciente de este producto agrícola en la región. El estudio muestra una serie de fluctuaciones tanto en la superficie cosechada como en los niveles de producción. En 2022, la superficie cosechada se redujo en -13.94 %, mientras que la producción aumentó en 4.72 %. En 2023, la producción creció 7.25 %, aunque la superficie apenas varió (0.59 %). Para 2024, se reportó una disminución de -1.07 % en la producción respecto al año anterior. Esta situación evidencia una relación inestable entre el área cosechada y el volumen producido.
Asimismo, el rendimiento por hectárea presentó variaciones significativas: en 2021 se redujo en 4.47 %, mientras que en 2022 se incrementó en 21.87 %. Los precios del café también mostraron una alta volatilidad. El mayor incremento se produjo en 2021 (66.36 %), seguido de una caída en 2023 (-9.14 %). En cuanto a las exportaciones, el valor FOB creció en 2022 un 43.93 % impulsado por condiciones externas favorables, pero disminuyó en 2023 un 26.85 % y se recuperó parcialmente en 2024 con un aumento de 25.84 %.
El informe identifica cuatro aspectos clave para fortalecer el sector cafetalero en Cusco: la mejora en la tecnificación y el manejo agrícola para estabilizar la producción; la diversificación de los mercados de exportación y la obtención de certificaciones para reducir la dependencia de destinos volátiles; la optimización de insumos y el acceso al financiamiento para mitigar el impacto de los altos costos operativos; y el incremento del valor agregado mediante denominaciones de origen, certificaciones y productos procesados.